El panda bebé de origen chino nacido hace más de 100 días en el Parque Nacional de Washington, capital de Estados Unidos, por fin recibió su nombre oficial: Taishan, el cual fue elegido de entre los cinco opcionales propuestos al parque por los ciurredanos. De los 200 mil cibernautas participantes en la campa?a, el 44% prefirió darle este nombre. Los otros cuatro nombre opcionales eran Huasheng, Shenghua, Longshan y Qiangqiang. Anteriormente, sus cuidadores simplemente lo llamaban “pedacito”. Este cachorro, que nació el 9 de julio, mide ahora 68,8 cm de largo y 6,4 kg de peso, dice el veterinario, quien a?ade que hasta el momento ha estado creciendo muy sano.
Se comenta que a este animalito atractivo le están saliendo dientes, que además de retozar con su mami, ha empezado a “patrullar por su feudo” con cautela, pero que sigue bajo la estrecha vigilancia de su progenitora, y que probablemente no recibirá visitantes hasta diciembre. Su madre Meixiang, de seis a?os, fue concebida por primera vez de modo artificial, y llegó a Washington en 2000 junto con Tiantian, de siete a?os, para estar allí por diez a?os. Los otros dos pandas Lingling y Xingxing, también del Parque Nacional de Washington, lograron aparearse en cuatro ocasiones para dar cinco criaturas, pero las cuales murieron desafortunadamente a pocos días de nacidos. Según un convenio chino con Estados Unidos, todos los pandas bebés nacidos en este país pertenecen a China y “volverán a casa” a dos a?os de vida.
Aparte de Meixiang, otra hembra, Baiyun, que vive en el Parque de San Diego, también está pre?ada. El examen ultrasónico hace creer que Baiyun tiene dos fetos. Si los gemelos nacen y sobreviven sin convenientes, sin duda surgirá en la ciudad una oleada de pasión por esta especie preciosa y exclusiva de China.
(27/10/2005, CIIC)